Ver a un niño con la misma ropa en repetidas ocasiones o con accesorios que no van muy ad hoc con la temporada no siempre es responsabilidad de los padres, hoy en día los pequeños han empezado a tomar la batuta y deciden qué ropa usar, aunque ésta no sea la más adecuada ni la del último grito de la moda. 

Cuando son unos bebés es el gusto de la madre el que queda plasmado en la forma de vestir del niño, sin embargo esto se va modificando entre los 2 y los 5 años de edad, etapa en la que ellos han empezado a decidir qué ponerse.

Consientes de este nuevo mercado, casas de moda como Calvin Klein, Paula Caen D'Anvers, Agatha Ruiz de la Prada, entre otras, incluyen en sus colecciones prendas especialmente pensadas para los más pequeños, pero con las mismas características de las prendas de los adultos.